Ventajas y desventajas del porno casero

Mucho cachondeo es lo que buscas en tu porno casero, y por supuesto, lo logras. Mirar abiertamente tus juegos sexuales, ya sea sola o en compañía de una pareja teniendo relaciones sexuales, siempre te sacará los colores a la cara y convertirá tu fantasía en la mejor realidad.

Una vez que lo grabas, ¿qué haces con él?, ¿solo lo miras tú? Por supuesto que sientes deseo de compartirlo. Si en el vídeo te encuentras sola, masturbándote, haciendo un stripp tease, o jugando con consoladores, deseas que lo vea tu chico y hasta otros que se te llenarán de elogios y de “me gusta” en su publicación, todo lo que necesitas para sentirte deseada y sexy. Por otra parte, su la grabación los presenta a los dos teniendo sexo, lo más lógico es que ambos lo miren a menudo y quieran repetir la chispa del momento pasado.

Pero es ahí, en la publicidad, donde se vuelve peligroso, o  cuando lo grabas y compartes con tu pareja. La desventaja de que tú o tu pareja lo utilicen ilícitamente para humillar al otro en público se ha visto ya en muchos casos, pues los que una vez estuvieron unidos como tortolitos, un día serán enemigos, listos para atacar.

Si las cuelga en Internet sin tu consentimiento, o lo haces tú, se convierten en públicos y deja de ser una manera erótica de disfrutar para convertirse una pesadilla, y aunque las leyes de muchos países lo condenan, ya el mal está hecho y es difícil de erradicar.

Ese es el motivo por el que muchas personas, aunque lo desean y sienten atractiva la idea de grabarse manteniendo relaciones sexuales, dudan y lo rechazan, por temor a lo que sucederá después con ese material grabado.